T-Wolves: Caso Abierto

09/01/2011

 

Están siendo unas semanas duras para Minnesota Timberwolves. Primero LeBron James les puso en el disparadero cuando habló de reducción, sugiriendo (hipotéticamente) cuánto mejor sería la NBA si Kevin Love simplemente jugara en cualquier otro lugar. Después, tras la humillación que recibieron los Lakers el Día de Navidad ante los Heat de James, Kobe declaró que a partir de entonces necesitan prestar atención a todos y cada uno de sus rivales, añadiendo “incluso a Minnesota”. Así que con el 9 – 28 de los Wolves actuando como saco de golpes para las dos mayores megaestrellas de la Liga, no es una sorpresa que la frustración en la franquicia se esté ya desbordando.

La atmósfera en Minnesota no es precisamente agradable. La amargura es constante porque nadie mueve un dedo en pro de mejorar la plantilla. A pesar de la gran cantidad de point guards que su GM, David Kahn, ha drafteado o adquirido últimamente, los Wolves pueden decir que todavía no tienen a uno de verdadero nivel. En vez de usar el espacio salarial que la franquicia todavía tiene libre para conseguir uno, Kahn parece conforme en esperar al ya mítico en Minnesota Ricky Rubio, que ésta vez sí parece que el próximo verano dejará Barcelona rumbo a su sueño NBA. En vez de añadir al roster la tan necesitada presencia defensiva a su frontcourt, Kahn opta claramente por mantener la flexibilidad en su payroll, seguramente por la incertidumbre que provoca la situación que se avecina con la negociación del nuevo convenio colectivo.

Tras dos años a la sombra de Wade, Beasley por fin rinde (y sonríe)

Esta estrategia no sugiere, sino que claramente indica que Kahn ha decidido ya tirar esta temporada a la basura, en nombre de días mejores que se espera llegarán. A veces, ésta es sin duda una buena estrategia, quizá la mejor según el caso. Pero no para un equipo que no llega a los playoffs desde 2004 y no tiene un balance victorias / derrotas positivo desde la regular season 2004-05. ¿No son ya demasiadas las temporadas tiradas a la basura? No están precisamente para bromas en Minneapolis, pues cuentan con, cómo máximo, 33 victorias en temporada regular desde que se firmara el todavía en vigor actual convenio colectivo en 2005.

Con los Timberwolves soportando una de las menores cargas de salario de los integrantes de su roster (46M$) de la Liga, y sin el liderato de ningún veterano sobre la pista, el coach Kurt Rambis debe pelearse cada noche por sacar el máximo rendimiento de una plantilla demasiado inexperimentada. Dos de sus jugadores con más recorrido en la NBA, Corey Brewer y Sebastian Telfair, están locos porque sus agentes les llamen y les digan  que entran en cualquier traspaso; mientras que la promesa de la llegada  a Minnesota de Ricky Rubio ya no es suficiente para que exista en la ciudad nada parecido al optimismo a corto plazo.

David Kahn ha declarado recientemente que, a causa de las lesiones de Jonny Flynn y Martell Webster, necesita más tiempo para evaluar al roster en busca de posibles intercambios que mejoren el nivel competitivo del equipo. Las previsiones hablan de tres o cuatro semanas más. Demasiado tiempo. Más viendo como los T-Wolves han perdido algunos partidos contra equipos más veteranos simplemente por falta de cohesión y experiencia en los últimos minutos. Cohesión y experiencia… dos virtudes que el equipo de Rambis no posee.

#6 del Draft’09, uno por encima de Ricky, Flynn nunca explotó

Vista, además, la habilidad negociadora de Kahn recientemente (sin ir más lejos, este verano traspasó a Al Jefferson a Utah Jazz, a cambio de futuras elecciones de Draft; incorporó a un point guard más, Luke Ridnour; y adquirió al talentoso pero problemático Michael Beasley), divisar el futuro inmediato no disipa precisamente la angustia. Rambis, sin embargo, le ha sabido dar minutos y sacar partido del gran Kevin Love, así como de un hasta ahora intachable Michael Beasley, o hasta de Darko Milicic. Pero el equipo necesita más, a la espera de lo que pueda llegar cuando termine el periodo de reflexión que a este respecto se está tomando Kahn.

La CBSSports.com informó recientemente que los Wolves están elaborando un plan en la sombra que traería a O.J. Mayo a Minnesota. Curioso, cuando fueron los propios Wolves los que, la misma noche del Draft de 2008, intercambiaron los derechos de Mayo con los Grizzlies, a cambio de los de Love. Pero lo cierto es que Mayo necesita un cambio. Frustrado por ver relegada su presencia a salir desde el banquillo esta temporada, su reciente y muy comentada pelea con Tony Allen en el avión que llevaba a Memphis de California a Tennessee no hace más que empujarle al vacío de una salida inmediata. Dicho plan, pretende unir la temporada que viene en el backcourt titular del equipo a Mayo con Rubio; siempre que éste último, y a pesar de lo que pueda ocurrir tras la firma del nuevo convenio colectivo prevista para este próximo verano, cumpla la palabra dada a Kahn en el verano de 2009 de estar solo dos temporadas en Europa. Pero incluso si Rubio acabara llegando, ¿quién puede garantizar que su enorme talento prosperará desde el primer día?

Jugador-franquicia. De seguir con los números de este año, Love será el 1º jugador en la historia de la NBA en promediar más de 20ppg (hoy, 21.2), 15rpg (hoy, 15.6) y un 40% en triples (hoy, 44.3)

Sea como sea, tampoco estos posibles movimientos añadirían al roster de los Wolves aquello de lo que tanto carecen: experiencia y liderazgo. Y sí que, en cambio, potenciarían todavía más la excesiva presencia de bases en la plantilla. Está bien que la estrategia de Kahn sea reunir a cuantas más bajas elecciones de distintos Drafts posibles, y tratar que nazcan, crezcan y se desarrollen juntas, pero… ¿hasta cuándo?.

La química entre David Kahn y Kurt Rambis parece que funciona, pero nunca ha habido química que aguante la física de los resultados. Al menos una cosa es segura: muchas más dosis de paciencia deben ser enviadas a los fans de Minnesota, y alguna más también para Ricky Rubio. Y en transporte urgente a poder ser.


Lakers Come To Town! Photo Gallery (y II)

09/10/2010

 

Memorias de una visita histórica que para siempre más se quedará con nostotros:


Un Crit Valent

08/10/2010

 

Algo Único. F.C. Barcelona: Campeón Intercontinental. Motivos Para Preocuparse?. Europa Gana El Pulso. Tenim Un Nom Que El Sap Tothom. Proeza No, Lo Siguiente. Pete Mickeal, Ese Hombre Osado. Un Antes Y Un Después. Campeones De La Conferencia Mediterránea. Cura De Humildad… Serían todos títulos válidos para este post, el del día después de que el Campeón de la Euroliga batiera al Campeón de la NBA.

Regal F.C. Barcelona (92-88) Los Angeles Lakers.

Homenaje al Pau del St. Jordi: 25 puntos, 10 rebotes. El mejor de L.A.

No nos equivocamos en el pronóstico, pero sí lo haríamos si cayéramos en la confusión demasiado extendida de elogiar el baloncesto FIBA tras la victoria, generalizando así lo que fue una particularidad. Porque los equipos que en Europa juegan como el Regal F.C. Barcelona se pueden contar con los dedos de una mano, y nos sobrarían todavía dos o tres. Es el Barça el que ha ganado a los Lakers, y por tanto solo alabanzas para el equipo que dirige Xavi Pascual. Eso sí, muchas alabanzas. Dijo ya Antoni Daimiel durante la retransmisión del partido que los tweets de los mass media baloncestísticos norteamericanos presentes en el Palau St. Jordi mostraban su admiración hacia la calidad y velocidad de la circulación del balón. Y conste que una opinión de un periodista de NBA.com o ESPN (por citar solo dos) está siempre llena de objetividad.

En Estados Unidos, una franquicia está hoy en Charlotte y mañana en New Orleans. Otra lleva 30 años en Seattle y a partir de mañana juega en Oklahoma City. U otra que ahora está en Detroit puede que mañana esté en Las Vegas. Los propios Lakers ganaron 5 de los 16 campeonatos que hoy tienen con sede en Minneapolis. Es por ello que el arraigo que las franquicias tienen con su ciudad y sus habitantes es mucho menor que el que existe en Europa. Esto se traduce, periodísticamente, en análisis más ponderados, menos viscerales i más apoyados en datos objetivos (estadísticas, principalmente). Puede que entonces ayer algunos de los enviados especiales al partido descubrieran que en Europa se mueve más el balón sin jugador que el jugador con balón. Y nadie puede dar una master class de más nivel al respecto que el actual campeón de Europa y desde ayer extraoficialmente del mundo, el Regal F.C. Barcelona.

Circulación de balón? Ésta es la jugada #1 del Daily Top Ten que elabora NBA.com. Puro showtime de los Barcelona Globe Trotters

Es la décima victoria de un conjunto (o selección) europeo ante uno NBA en los 78 encuentros precedentes entre equipos de los dos continentes. Pero ninguno antes gozaba de una relevancia como la que desde ayer tendrá el triunfo del Barça, pues es el primero que se produce ante un Campeón NBA en ejercicio. Fue un partido tenso, vibrante y hasta en ocasiones bronco. Poca fiesta y mucho orgullo. Nada de amistoso y mucho de final sin trofeo. El sentimiento de espectáculo quedó rápidamente en un segundo plano, superado por el de inédita pero fuerte rivalidad. A modo más que significativo, miles de los aficionados que ayer llenaron hasta la bandera el Sant Jordi con camisetas de sus ídolos Bryant o Gasol, acabaron abucheando los tiros libres de uno o las faltas del otro. Especialmente remarcable en este sentido los gritos de “MVP, MVP, MVP” de la grada a Juan Carlos Navarro en los últimos minutos.

El partido transcurrió ya de buen principio por cauces inesperados por los allí presentes. Y el mérito de esta situación debe ser atribuido al nivel del Regal F.C. Barcelona, ex aequo con el bueno de Ron Artest, inexplicablemente caliente con Pete Mickeal desde el minuto 1. Pero fue la transformación que colectivamente y de forma inconsciente asumió la totalidad de la grada lo que convirtió el partido en una maravilla. Íbamos a un show y nos vimos metidos en una final. Mejor imposible.

Como suelen, Navarro se salió ante equipos NBA mientras que Ricky desperdició una oportunidad más de lucirse ante el coro de analistas americanos que desde hace más de cinco años siguen sus pasos. Pero fue el partido de Pete Mickeal. El de Rock Island (IL) acabó como máximo anotador, reboteador y asistente de su equipo (26, 13, 7… ahí queda eso), pero su agresividad en los dos lados de la pista (primero con Artest y después en un duelo memorable uno contra uno con Kobe Bryant) enchufó a la grada y a sus propios compañeros, haciéndoles creer a todos que por actitud, agallas y orgullo no iba a ser. Y no fue. Mickeal nunca ha llegado a cerrar la puerta por la que un día salió de puntillas de la NBA (seleccionado por Dallas, fue traspasado a los Knicks en los que nunca pudo brillar); desde ayer, esa misma puerta está ya abierta de par en par.

One on one Mickeal v Bryant en algunas fases, con Kobe de perdedor

Algunos datos del boxscore alientan el reflejo del marcador final que demuestra que el Regal F.C. Barcelona fue mejor, a pesar de llegar a perder de 11 durante el tercer cuarto. 23 asistencias de los catalanes contra 14 de los angelinos. 8 a 2 en tapones y 12 triples anotados por los de Xavi Pascual por ninguno (0 de 14) de los de Phil Jackson, y eso que se jugaba en distancia NBA. A Phil Jackson todavía habría que exigirle que nos explicara porqué miente cuando después del partido declara que “el Regal F.C. Barcelona no tiene el nivel físico para jugar en la NBA”, aunque solo sea para evitarle un próximo ridículo como el que minutos después sufrió al oír como su capitán y jugador-franquicia, Kobe Bryant, le desmienta en público. Quizá por el calentón de la derrota. Quizá porque tuvo que hacer jugar a su quinteto inicial (Fisher, Bryant, Artest, Gasol y Odom, el mejor posible con Bynum lesionado) 69 minutos más de lo que le hubiera gustado (154 minutos en Barcelona por los 85 del pasado lunes en Londres ante Minnesota). O a lo mejor porque Kobe (cuyo 2 de 18 – 0 de 8 en triples – entre los dos amistosos demuestra que no está bien físicamente) se vio obligado a jugar 25 minutos, 19 más que tres días atrás. O incluso porque a pesar de todo eso, su equipo acabo perdiendo.

Marcando dos abajo. Balance 0 -2 de la gira de los Lakers por Europa

Metidas de pata y cordialidad entre colegas aparte, en lo que todos coincidimos es en que la visita de tres días de Los Angeles Lakers campeones de la NBA a nuestra ciudad quedará para siempre en nuestras cabezas y nuestros corazones. Porque aunque nadie esconde aquí sus cartas, y hasta el más ciego puede percibir que el EA Sports NBA Europe Live 2010 es tan solo una de las ramas de la mejor campaña publicitaria en materia de deporte que es la NBA, poder haber vivido un St. Jordi lleno e implicado y un partido como el que ayer se dio, compensa tanto al más crítico como al menos creyente.

Gracias Lakers, gracias Barça.


Previa FCB v LAL: Querer (Puede Que No Sea) Poder

07/10/2010

 

Cuando la NBA entrega el Larry O’Brien Trophy al campeón de la Liga a mediados de Junio, no nombra al equipo ganador como “Campeones de Estados Unidos” o ni tan siquiera “Campeones de América”. En la misma inscripción grabada en la parte baja del trofeo se puede leer perfectamente World Champions. Y es por esa misma tan grande distinción, por la que los dos veces consecutivas campeones del mundo, Los Angeles Lakers, sienten una presión añadida entorno al enfrentamiento (amistoso, en principio) con los actuales campeones de Europa, el Regal F.C. Barcelona.

Normalmente, en las pretemporadas NBA importa mucho más lo que propones que lo que obtienes, así que los resultados de los amistosos, en realidad, no importan demasiado. Los amantes de la NFL saben que no hace mucho, en 2008, por ejemplo, los Detroit Lions tuvieron un inmaculado 4 – 0 en pre-temporada, para terminar con un histórico 0 – 16 en temporada regular. Sin embargo, esta vez, en el partido que enfrenta hoy al campeón de la Euroliga con el campeón de la NBA en el Palau Sant Jordi de Barcelona, el resultado sí importa, más si cabe para los Lakers. Tres razones sustentan este argumento.

La primera es que los de Los Angeles quieren ganarlo por Pau Gasol, que vuelve a casa como rutilante estrella NBA para enfrentarse a su antiguo equipo, en su antigua ciudad y ante los ojos de muchos de aquellos que vieron allá por la temporada 2000-01 como un espigado y tímido jugador salía de la nada para llegar a impresionarnos a todos. La segunda es que los Lakers quieren ganarlo por la propia NBA; para mostrar que, aún con un Andrew Bynum lesionado y un muy limitado físicamente Kobe Bryant, la liga norteamericana produce un mejor ganador que el que sale de Europa, alejando así dudas sobre el status de ambas competiciones en el conocimiento general mundial. Y finalmente querrán ganarlo también para salvar la gira por Europa que tan dubitativamente empezó con una descuidada derrota (92 – 111) ante unos Minnesota Timberwolves en plena reconstrucción el pasado lunes en el O2 Arena de Londres.

6 min y al banquillo. El bagaje de Kobe ante los T’Wolves en Londres

No va a ser nada fácil que alguna de éstas tres motivaciones (o las tres juntas) se alineen de tal forma que se vea cumplido el objetivo de los de Phil Jackson. Sorprende mucho ver como en las cada vez más presentes casas de apuestas por Internet, se pague (bastante) mejor la victoria catalana que no la angelina. Con los datos objetivos puestos sobre la mesa, no hay mejor plantilla que la del Regal F.C. Barcelona en Europa (o si la hay, todavía debe demostrarlo) y el estado de forma de ambos conjuntos está lejos de cualquier comparación racional por estas fechas. Además, como es lógico, la idea de Copa Intercontinental (Mundial de Clubs, lo llaman ahora) no solo es para unos. Existe entonces alguna oportunidad mejor para el Regal F.C. Barcelona de ganar a un campeón de la NBA, en casa, y poderse sentir, aunque sea extraoficialmente, campeón del mundo? No, y mil veces no. Además, hace dos años el partido fue el mismo pero en el Staples Center y los Lakers sudaron sangre para ganar (108 – 104)… y en el Regal F.C. Barcelona todavía no estaba Ricky.

«Hey Ricky, te vienes ya a la NBA?«, con Pau de testigo

O sea que en motivación, como en estado físico, los americanos no ganan tampoco a los europeos. Y bien lo sabe Pau Gasol, formado en el equipo al que debe batir mañana jueves, cuyas declaraciones pre-partido hablan más de determinación que de nerviosismo. De ambición que de expectativa. De partido que de fiesta. De acuerdo, estamos ante un paso más en el ejercicio de la mejor campaña de marketing que existe en el mundo que es la NBA intentando conquistar Europa, pero quedarnos ahí, esta vez, sería no albergar la verdadera dimensión del partido. Llega demasiado pronto y en inferioridad de condiciones para los visitantes, pero este partido es el primer reto importante que se le plantea a Los Angeles Lakers, y lo juegan en campo contrario.

Y en una temporada ésta, en la que a la franquicia de L.A. le sobran retos, y de los grandes. Igualar a los Celtics como franquicia con más anillos, Three-peat para esta generación, Kobe igualando a MJ en número de anillos (lo que al final importa), Phil Jackson logrando lo mismo que logró ya con Chicago (dos three-peats) y porque no, destronar a Miami Heat, los reyes sin corona pero ya con muchos súbditos. Ahí es nada.

Van dos seguidos, pero el tercero sería el más importante

Todos los deportistas profesionales quieren sentir la presión del ganador. Cierto. Pero todo parece indicar que para los Lakers la posibilidad de conseguir el tercer anillo consecutivo que cerraría más de un círculo de forma brillante es un “ahora o nunca”. Este año o seguramente ningún otro. Nueve de los catorce jugadores que formarán el roster definitivo de Phil Jackson para esta temporada ya superan la treintena. Estaban Fisher (36), Kobe (32), Gasol y Walton (ambos 30) y Artest y Odom (ambos 31 en Noviembre). Y se ha fichado a Ratliff (37), Blake y Barnes (30, los dos). Pero esto no es lo peor. Existe otro argumento que da a pensar que si los Lakers no ganan de nuevo el anillo este año, no hay motivo por el que lo ganen en los siguientes que vayan a venir: faltan diez meses para que llegue Julio de 2011, la fecha que todo el mundo NBA teme pero de la que nadie habla aún. Cuando vence el actual convenio colectivo de la Liga y de la renovación del cual, tanto propietarios como jugadores se muestran deliberadamente pesimistas. La sombra de una nueva huelga planea ya por los despachos de las 30 franquicias.

Hagamos un ejercicio de auto-flagelación y pongámonos entonces en el peor escenario posibles para los Lakers: Los Angeles no gana el título esta próxima temporada, se cancela la regular season 2011-12 y Kobe Bryant ya tiene 34 años cuando presumiblemente pueda de nuevo intentar ganar el Larry O’Brien Trophy. Temblor de piernas.

Con 32 años, a MJ le quedaban 3 anillos por ganar. Podría Kobe?

Ya habrá tiempo para valorar lo que suceda en Julio de 2011, pero no hay duda que a los Lakers les vendría muy bien, ahora que todavía estamos en Octubre de 2010, empezar a cumplir con los retos que le vayan llegando esta tan importante temporada que ya por suerte llama a la puerta. El primero, hoy en Barcelona. Y sin Bynum y con ni un cuarto de Kobe la empresa es mucho más difícil de lo que reflejan las webs de apuestas por Internet. El favorito juega en casa.


Lakers Come To Town! Photo Gallery (I)

07/10/2010

 

Barcelona, 06 de Octubre de 2010

>> Palau Sant Jordi Training Session & Basketball Clinic

>> Nike & House Of Hoops «Shot Faster» Event


Ricky & NBA: No Hay Nada Claro

06/09/2010

 

El contrato que tiene firmado Ricky Rubio con el F.C. Barcelona lo dice bien claro y todas la partes (el propio equipo, él mismo, los Minnesota Timberwolves y la misma NBA) son conocedoras de la cláusula que éste incluye en el sentido que, tras la temporada 2010-11, Ricky Rubio tiene la opción de incorporarse a los Wolves, el equipo que le drafteó en el verano de 2009 con el #5. Todos los analistas de la NBA saben que las virtudes del jugador van más allá de los 5.2ppg, 3.3rpg y 6.2apg que en 26.8mpg está promediando Rubio en este Mundial de Baloncesto de Turquía. Mucho más allá. De hecho, desde ya hace más de tres años, su llegada a la Liga se espera con una desmedida, aunque justificada, expectación.

Campeón de Europa (sub-16 y absoluto), subcampeón olímpico, una Euroliga, una FIBA Eurocup, una ULEB Cup, dos Copas del Rei, una Supercopa ACB y dos mejor jugador joven de Europa. Próximo reto: este Mundial.

Y aunque la primera pregunta que se hacen en Estados Unidos sobre Ricky Rubio estos días es muy simple (“Cuando viene a Minnesota?”), la respuesta, sin embargo, y a pesar de lo que diga la cláusula que ahora le une al F.C. Barcelona, es complicada y se puede llegar a complicar todavía más. Lo primero que hay que decir es que lo que los T’Wolves (o cualquier equipo NBA) deberán pagar para llevárselo es una cantidad considerablemente menor a la estipulada en el anterior contrato de Ricky con el Joventut de Badalona y que rondaba los 4 millones de $. Esto es importante porque, a fecha de hoy, los equipos NBA solo pueden llegar a pagar 500.000$ por romper un contrato de un jugador que juega en un equipo de fuera de los Estados Unidos.

Pero es que justo en el verano de 2011 vence el convenio colectivo, hoy todavía en vigor, de la NBA y habrá que redactar uno nuevo. Las negociaciones se prevén más duras que nunca entre el Comisionado David Stern, las franquicias y los representantes de los jugadores. Tanto, que en algunos medios ya se especula con la posibilidad de una huelga, como la que aconteció en 1999 con la famosa liga de los 50 partidos. Demasiada incertidumbre a los ojos de Ricky Rubio que puede interferir de forma decisiva en la voluntad del de El Masnou de recalar ya en la Liga. De hecho, porqué va a querer Rubio marcharse del F.C. Barcelona si en Europa puede seguir teniendo un salario considerablemente mayor que el que percibiría a partir de 2011 en Estados Unidos?

Sea cuando sea, el camino NBA de Ricky se parecerá (aunque lo superará) más al de Marc Gasol que al de Jorge Garbajosa

Por esas fechas, Ricky podría recibir cómo máximo 2 millones de $por año, según lo que permite el actual convenio por su posición de elección en el Draft de 2009. No hay que olvidar que si el jugador decidiera esperar hasta el verano de 2012 para dar el salto (o se viera forzado a ello por la presunta huelga), entonces podría llegar ingresar bastante más. El reglamento NBA es claro en este sentido: durante las tres primeras temporadas en las que un jugador ha sido drafteado, su salario está designado según la posición en la que haya sido elegido; a partir de entonces, la negociación está abierta. Ésta es una de las razones por las que la mayoría de jugadores europeos drafteados por franquicias NBA esperan algunos años antes de jugar en Estados Unidos.

Pero todo esto puede cambiar con el nuevo convenio colectivo que aún está por negociar entre todas las partes y que entrará en vigor justo al inicio de la temporada 2011-12. Por ahora, Ricky, el F.C. Barcelona y los Minnesota Timberwolves no pueden hacer otra cosa que observar y esperar. El temor del jugador y de su entorno es que los cambios que pueda haber entre este nuevo convenio colectivo y el ahora vigente sean a la baja. A todo eso hay que añadir que Ricky Rubio solo tiene 19 años y que el mercado potencial que le ofrece la franquicia de los Wolves y la ciudad de Minneapolis es de los más pequeños que la NBA puede ofrecer.

Ricky espera. Llegar a la NBA no es el objetivo y sí triunfar en ella.

Son demasiados factores inciertos en el brillante futuro de Ricky en Estados Unidos, por lo que aventurarse a afirmar que ésta será la última temporada de Rubio en Europa parece demasiado arriesgado. En España, en Estados Unidos o ahora en Turquía, lo mejor será seguir disfrutando de su talento y desparpajo que tan locos tiene a los americanos.


Esperando A Ricky Rubio

10/05/2010

 

Durante el pasado més de Julio el teléfono de los agentes de Ricky Rubio echaba humo. Pocos días antes había sucedido lo que nadie esperaba. Rubio aspiraba a estar entre los 3 primeros puestos del Draft’09, celebrado en el Madison Square Garden el pasado 25 de Junio de ese año. Y razones tenía para pensar que podía conseguirlo. Con el #1 ya otorgado meses atrás para Blake Griffin (que, curiosamente, hasta la fecha ha disputado los mismos minutos que Ricky en la NBA, es decir, ninguno), ni Grizzlies, ni Thunder ni Kings se atrevieron con Rubio, que cayó hasta el puesto #5 elegido por Minnesota Timberwolves.

Viaje de ida… y vuelta, el de Ricky en Junio’09 a la NBA. Todo para acabar volviendo

Portada de la SLAM Magazine de Junio’09. En EEUU están deseando la llegada de Rubio a la Liga

Fue un duro golpe para el de El Masnou. Primero porqué la destinación no era la propicia. Los Wolves son una franquicia a la deriva desde que en 2004 llegaron a las finales de la Conferencia Oeste. Ni una sola presencia en playoffs hasta hoy, y una media de tan solo 28 victorias en las últimas 6 regular seasons. Haber tenido 6 entrenadores en esas mismas campañas no ayudaba tampoco. Ni el hecho que, incomprensiblemente, Minnesota hubiera elegido en el #6 del Draft a otro base, de dudosas credenciales por lo visto hasta ahora.

Y segundo porqué el contrato que un rookie tiene asegurado como #5 del Draft no es el mismo que el del #2, por ejemplo. Y Rubio lo que no quería era cruzar el charco en busca de la aventura NBA en un mal equipo y encima cobrando poco. Además, mientras su agente americano negociaba con unos Wolves dispuestos a esperar lo que fuera por un jugador ya suyo, su agente en Europa le decía que los tres tótems (por presupuesto) del baloncesto FIBA tenían las puertas abiertas de par en par para el extraordinario base catalán. El presunto nuevo proyecto ganador de Florentino Pérez en el Real Madrid no convenció a Rubio, ni la adaptación a una nueva cultura y un idioma completamente desconocidos que implicaba aceptar el cheque en blanco que le ofrecía Olympiakos. No había duda que el F.C. Barcelona era lo que Ricky necesitaba. Un club mucho mayor que del que venía, donde podía progresar mucho, rodeado de excelentes jugadores, con un sistema de juego atractivo, un entrenador sin complejos y, aunque con las rotaciones sean cuales sean los nombres como estigma principal, cobrando todo lo que deseara. Y algo importante para un chico de, entonces, 18 años: cerca de casa.

Ayer, tan solo 10 meses después de fichar por el Barça, el Palais Omnisports de Paris Bercy fue el escenario de la ratificación del acierto deportivo de la sabia decisión tomada por Ricky en Julio. Solo el anillo de la NBA supera en cuanto a título más grande en el baloncesto mundial de clubes a la Euroleague que ayer conquistó Rubio con solo 19 años.

Rubio, corta la red del aro después de victoria. Un nuevo souvenir para su casa de El Masnou

En clave NBA, es solo un paso más de los muchos que ya ha dado Ricky en su progresión como futura estrella de la Liga que será. Nada hace pensar que Ricky no cumpla el segundo (y último) año jugando en el F.C. Barcelona que tiene por contrato. A partir del 30 de Junio de 2011, luz verde para Rubio para plantarse en la NBA ya como campeón de todo (con 21 años) en Europa. Dejen paso, porqué el futuro del #9 del Barça en Estados Unidos es prioridad. Suena atrevido, pero Ricky Rubio puede llegar a ser mejor jugador e incluso tener mayor impacto en la NBA que el que tiene Pau Gasol. Tiempo al tiempo.